El juego es un momento sumamente placentero.
Es un instinto que nos permite desarrollar la imaginación, compartir experiencias y además de desarrollar habilidades sociales.
Es un espacio en donde el niño puede interactuar con nosotros mismos y con todos los que nos rodean.
Jugamos porque necesitamos experimentar sensaciones que nos provoquen placer.
El juego simbólico es muy importante durante la infancia. A través de los símbolos los niños reducen la complejidad de la realidad. El juego facilita la comprensión de lo que somos y de lo que podemos llegar a ser.
El juego es aprendizaje y placer!!
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